El decimosexto cumpleaños de Himari será inolvidable para ella. Inesperadamente, recibe un testamento donde le dejan en herencia una misteriosa casa: la Casa Momochi. Al llegar allí descubre que dicha casa estaba construida en el límite entre el mundo humano y el reino espiritual. Allí conoce a Yukari, Ise y un peculiar chico llamado Aoi que parece esconder un secreto.