Marcus y Emily hacen amistad en un resort de México con Ron y Kyla, una pareja de locos fiesteros. Allí deciden disfrutar del momento dejándose llevar durante una semana llena de desinhibición y desenfreno con sus nuevos «amigos pasajeros». Meses después de la aventura, Marcus y Emily se horrorizan al ver que Ron y Kyla aparecen sin que los inviten en su boda.