Robbie se enamora de una nueva chica, Wendy, quien, para el horror de Earl, resulta ser la hija de Richfield. El jefe ve con buenos ojos que Robbie tenga citas con su hija, pero Spike, el amigo de Robbie, y su hermana Charlene le advierten de que Wendy está involucrada en un peligroso secreto que incluye a sus anteriores novios.